domingo

Lema Orante Semanal

Modelo Referencial Orante Del Despertar De Cada Día


28 de agosto de 2017


Cada aparente comienzo... es una bocanada de posibilidades.

Luego, en el transcurrir del acontecer, las realizaciones se hacen pobres, y es fácil que cunda el desaliento. 

Las dificultades se agolpan en la consciencia indecisa.

Luego viene el esfuerzo -como ¡casi un suplicio!- para seguir...  manteniendo el tipo.

El cansancio se hace un recurso auxiliador que reclama recompensa. 

Luego llegará la noche y... y pronto la justificación del sueño.

Y así, puede pasar un día... y otro, y otro, y otro, y otro.


¡Sorpresa en el despertar!  Bocanada de luz que alerta los sentidos. 
Entusiasmo por las demandas que aparecen. Rapidez-que no prisa- para ofrecerse sin prejuicios, escuchando y aprendiendo... y dándose en lo mejor que se tiene. Disolviendo contrariedades, y ejercitándose en 'haceres' que se van encontrando, con una solidaria colaboración y entrega; con el humor de... una flor recién abierta; con la frescura del primer rocío de la mañana.

Cualquier cosa puede sonarnos a conocida, pero... es distinta. Y cada vez que descubrimos matices nuevos, renovamos nuestra consciencia.

Casi nos apresuramos a culminar el viaje de la luz.

Y cuando llegan las estrellas, se sonríe con un leve recuerdo de los descubrimientos que han trascendido... y lo mucho que se ha aprendido.

Ya el sueño... ya el sueño nos reclamará el tiempo de universo.

¡Sí! Hay diferencias entre un modelo y otro. El primero es el modelo cotidiano que a todos suena. El segundo es un modelo orante que a algunos sorprende, que pocos creen, pero está extraído de la Creación, de la naturaleza de la vida.

No es discutible; es evidencia.

¡Pero cierto es que!...  aunque a medida está hecho, porque la Creación depara en cada uno y sutilmente nos une, es fácil que el hombre inteligente aporte críticas, opiniones, desavenencias, incomodidades, desacuerdos...

Debería ser suficiente con lo evidente, pero el hombre tiene afán de "mejorarlo". En realidad, el afán es por manipularlo y adecuarlo a la propia expectativa.

El modelo referencial orante del despertar de cada día... es una muestra de la continua renovación Creadora.

Es fácil pensar que... ¡bueno!, se creó la vida, se dio la vida, ¡y ya!... Y se acabará -en el pensamiento limitante-, y ocurrirán otras cosas que podemos especular. Pero, realmente, aunque sólo sea con las pequeñas muestras de ciencia que se saben, la Creación es constante; la expansión es creciente; se crean nuevos espacios sin tiempo... que aguardan oportunidades.

No somos ajenos a las dinámicas estelares que transforman la luz, que transpiran novedades, que acrecientan sorpresas.

Si atendemos al Sentido Orante de los recursos permanentes y renovados, y de las opciones nuevas -que puedan "parecerse" por necesidades de nuestra constitución actual, pero que son diferentes-, nos "garantizan" -entre comillas- un sinfín de ocasiones en donde los problemas se sustituyen por soluciones; en donde los prejuicios se disuelven por... decisiones, escuchas y aceptaciones; en donde la culpa desaparece... y surgen las responsabilidades.

En este sentido Orante nos sentimos, además de llamados, ¡reclamados!...

Y si bien en primera instancia nos desbordan, de inmediato, un halo de confianza se ciñe sobre cada uno cuando estamos en disposición; cuando estamos aceptantes; cuando no estamos pendientes de nuestra opinión, sino de la demanda de la necesidad.


Resulta por momentos difícil confiar, esperanzarse y... saber esperar.

Pero eso sucede por la demanda de ansiedad... que todo lo quiere lograr.

Si hacemos acopio de un quantum de humildad, de seguro que cualquier pequeño logro se hace... sorpresa, suerte y fantasía, y es suficiente caudal para que la esperanza ¡palpite!, para que la ilusión se crezca... y se pueda dar el peldaño siguiente, que de nuevo nos necesita.

Cuanto más se renuncia y más se repudia, más angustia se almacena...  y más incapacidad se produce.

Si -en cambio- nos convertimos en soluciones -como  decíamos hace un momento-, no se afrontan "los deberes" -entre comillas- como dificultades, como impedimentos, sino que se abordan como descubrimientos.

Y en todas las opciones que se presentan... de poder testimoniar, mostrarse, darse, aplaudir, aceptar, promover, hay que darse cuenta de que hay algo -llamémoslo  así-, algo de "Misterio", en lo que sucede; algo que "alguien" está tejiendo, y nosotros somos hilo y aguja, y no sabemos el qué cosemos, porque no somos nosotros los hilanderos.

El saber que... ¡que hay un impulso!... que nos promueve y nos incita, ¡y que hay un plan!... inconmensurable  y misterioso, nos da la consciencia de certeza al dejarnos llevar, nos hace trascender a lo rico y a lo pobre, y nos sitúa en la operatividad.

Ocuparse sin preocuparse... Resolutivo sin problemática... Clarificador sin complicación... Sencillez  ante lo enrevesado...

Fe ante lo iniciado, ¡sabiendo siempre de ese halo impulsor, promotor, que está ahí, en cada uno, y que podemos percibirlo en nosotros!

Somos cómplices de una Creación... 

Somos signos y señales de un Misterio...  

Somos una muestra de potenciales ilimitados.

Que no se caiga en la indolencia, ni en el juicio, ni en la condena, ni en la separación, ni en el desespero. Eso es propio de la usurpación de las evidencias.

Que las querencias no suplan al amar. Que las posesiones no se implanten ante el Amor. Que el fluir de los sentidos se haga sentires... en la ilusión, en la confianza mutua.

No hay comienzo, pero hoy es un buen día para manifestarse.



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